Reseña: La distancia entre tú y yo.

Titulo: La distancia entre tú y yo.

Autora: Kasie West.

Encuadernación: Tapa blanda

Editorial: Plataforma Neo.

Lengua: Castellano.

Nº de páginas: 312 págs.

Autoconclusivo.

Caymen Meyers aprendió de pequeñísima que no se puede confiar en la gente rica. Y tras años estudiándolos tras la caja registradora de la tienda de muñecas de cerámica de su madre, nada le prueba lo opuesto. Un día Xander Spence entra en la tienda. Es alto, guapo y exageradamente rico. Pese a su encanto y el hecho de que parezca ser la única persona que la entiende, Caymen sabe que su interés por ella no durará. Pues esa es exactamente una de las cosas que aprendió de su madre: la atención de los ricos se desvanece velozmente. Mas justo cuando la fidelidad y el aprecio de Xander están a puntito de persuadirla de que ser rico no es un defecto, Caymen se percata de que el dinero jugaba un papel mucho más esencial en su relación de lo que pensaba. Con tantos obstáculos en su camino, ¿van a ser capaces de recorrer la distancia que los aparta?

Hace unos días logré hacerme con este precioso libro y la verdad es que me encantó el envío de la editorial. Era la primera vez que pedía algo directamente en su página y, además de rápido, me llegaron un montón de detalles extra.

En cuanto al libro por fuera podemos observar que han mantenido la portada original y parte de la tipografía utilizada. Creo que esto es un detalle muy bonito porque la verdad es que tanto cuidado en estos detalles demuestra cuánto se aprecia un libro.

El tipo de narración es en primera persona, narrado por la protagonista y en presente. Aunque en otras ocasiones digo que me gusta más saber lo que opinan otros personajes para lograr conocerlos mejor, en esta ocasión me congratula decir que me ha parecido perfecto y muy bien cuidada la traducción.

La trama de este libro es de lo más sencilla y no se puede esperar grandes dramas ni problemas. Es un libro para pasar el rato, simple y bonito a partes iguales. Se centra en las diferencias sociales ente la gente rica y la pobre, como ambos bandos tienen prejuicios y dudas sobre el otro. En todo momento tratan de hacer que todo esto se vea de otra manera, intentando entender a los personajes del libro.

Tú siempre serás diferente.

Los protagonistas son bastante singulares. En primer lugar tenemos a Caymen, una chica excepcionalmente sarcástica (quien lea el libro entenderá) que vive encima de una tienda de muñecas de porcelana. La verdad es que no soy muy fan de estas muñecas, pero me resultaron hasta entrañables por como están descritas, lo que demuestra que también es un punto a favor saber poner corazón a estos pequeños detalles.
En fin, Caymen es una joven que no quiere saber nada de ricos debido a su pasado y a lo que su madre siempre le ha dicho. Es obediente y quiere lo mejor para el negocio, pero su sentido del humor no ayuda mucho a que esto pase realmente. Es divertida, enamoradiza tierna y muy sarcástica. 
Por otro lado tenemos al chico rico -pero no malo en este caso-, Alexander o Xander, como se hace llamar él mismo. Es un chico dulce y detallista, que sigue el juego con facilidad y no tiene claro su futuro.
La verdad es que los personajes son así y ya está, no tienen mucha más profundidad donde indagar. Los personajes secundarios y padres de los protagonistas tampoco salen tanto como para llegar a conocerlos a fondo, aun así se les acaba cogiendo cierto cariño.

Y ahora las partes buenas y las partes no tan buenas. Es un libro sencillo, rápido de leer (lo acabé en menos de un día). Los capítulos son muy cortos y eso ayuda a leer bastante rápido y tampoco es muy gordito que se diga.
En cuanto a lo malo solo tengo que decir que a mi me parece inconcluso. O sea, me imagino más o menos como acaba todo pero para mi le faltan tantas cosas que veo que es un puno muy negativo. No hubiera pasado nada por explicar lo que ocurría en unas cuantas hojas más, ni cómo se iba a desarrollar la historia a partir de donde se deja.

En resumen, es un libro para pasar un buen rato y olvidarte de lecturas más pesadas. Simple y bonito, sin mucha tensión y con buenas dosis de sarcasmo que te hacen hasta reír al ver las reacciones tan naturales de los personajes. Como punto negativo: lo inconcluso que parece.